El MALOKA-GALIPA es una montaña rusa de satisfacciones y disgustos. No me gustan las atracciones de ese tipo, nunca he subido a una, después de que con 20 años me subiera en Artxanda en un pulpo y lo pasara horriblemente mal.
Este torneo está siendo muy difícil de llevar y ya me está afectando a mi salud física, por la ansiedad, la tensión, el estrés y el trabajo que conlleva... que te hace ir siempre de prisa y llegar tarde a todos los sitios. En ningún MALOKA había dormido tan poco durante el torneo. Mucha carga para poco mula.
Todos los partidos de juez, mi vista cansada, mis piernas padecen tantas horas de pie. Casi un año con fascitis plantar y ahora que la estab curando, me pongo a hacer el MALOKA.
Las fotos son bonitas, sí, pero... las decepciones son superlativas.
Los reportajes dan publicidad, sí, pero... llevo ya escrito lo de un libro durante el MALOKA.
Las visitas de HAIXEDER no me las esperaba, ya se acercan a las 60.000 en el mes de julio y miércoles-jueves juntos superado las 7.000. ¿Para qué? Me sorprende y halaga, pero no me consuela.
EL MALOKA-GALIPA es bonito, pero yo estoy desencantado, totalmente.
Si es verdad que hay gente como Txarly, "El Cadenas", Jabitxa, Manu Piedra, Lier, Oier, Garazi, Silvia... que nos ayudan a Bego Campo, Amaia y a mí en las tardes de frontón; y que me llevo en el corazón a Goiko, Lore, Gurene, Gonzalo Soto, Tellitu... pero en un jardín tan grande tengo poquitas flores. Mal jardinero debo ser.
No voy a nombrar lo negativo, pero se te clava como una espina de palmera. Y duele. Lo negativo está en mí, lo llevo encima.
La factura de este MALOKA-GALIPA va a ser como la sombra del ciprés de Miguel Delibes: muy alargada.
Sólo hay un culpable, yo. Y la solución está en mis manos. Cometo demasiados errores. Por eso estoy desencantado de mí mismo. El partido no ha acabado aún, pero yo ya he perdido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.