jueves, 9 de mayo de 2013

"El bombero y el médico"

Dedicado a los bomberos y a los médicos 
nobles, valientes y honestos.


Poema "El bombero y el médico"

Es la media noche, todo está en silencio,
en una casita de mísero aspecto
una anciana  enferma reposa en su lecho
y allí, junto a ella, su pena sufriendo,
se ve triste al hijo, un joven bombero,
que salva ya vidas en algún incendio
y para su madre no encuentra remedio,
porque no es su ciencia salvar al enfermo.

Es la media noche, todo está en silencio,
tan sólo se escucha el ronquido seco
de aquella ancianita que muere en el lecho
y el llorar del hijo, el joven bombero,
que ve muy cercano el fatal momento.

Es la media noche, todo está en silencio,
de pronto en la torre del viejo convento
lanzan las campanas metálico acento
y se escuchan gritos, ayes lastimeros,
y una voz que dice: "¡Vecinos, hay fuego!"

Un hombre rendido, casi sin aliento,
penetra en la casa donde está el bombero,
e implorando  dice: "¡vaya, se lo ruego!
Mi pobre viejita, la que tanto quiero,
está entre las llamas, y muere sin remedio.
¡Vaya usted a salvarla, porque yo no puedo,
mi ciencia es, amigo, salvar al enfermo".

"Pues, Dios me lo envía", le dice el bombero.
"Aquí está mi madre, también sin remedio,
está muy enferma y a usted se la entrego,
sálvela su ciencia porque yo no puedo,
el deber me llama y voy para el fuego
a salvar  la suya", y salió ligero...

Pasaron dos horas de angustia y tormento,
pasaron dos horas y tornó el bombero,
 "¿Dónde está mi madre? " - preguntó al momento.
El médico dijo: "aquí está, en su lecho,
la ciencia fue inútil, la anciana se ha muerto,
quizás,  sí pensando en el hijo bueno
que ahora me devuelve lo que yo mas quiero".

"¡Llevadme, doctor, llevadme al momento!"
El doctor llorando lo llevó hasta al lecho
y allí, arrodillado, el joven bombero
dio a su madrecita el último beso,
sin poder mirarla, porque estaba ciego
por salvar a la anciana que moría en el fuego.

Ha pasado el tiempo, y la gente toda
olvidó el suceso del que sólo queda,
cuan triste recuerdo, una cruz sin nombre en el cementerio
y un pobre mendigo que tiende el sombrero
y pide limosna para su sustento.

Otra media noche, de nuevo el silencio.
El doctor dormita cuando un enfermero
se acerca a anunciarle que trae un enfermo.
El médico lo escucha y acude al momento,
pero ya era tarde, el enfermo había muerto...
un guardia le dice: "...era un pordiosero,
un desheredado sucio y harapiento,
un pobre mendigo que tendía el sombrero
pidiendo limosna para su sustento.
Le decían el ciego".

El médico mira la cara del muerto
 y recuerda angustiado la noche del fuego,
y responde al guardia: "¡No, no fue un pordiosero!,
este hombre fue un bravo, fue noble, fue bueno,
éste fue un valiente, éste fue un bombero,
que una noche horrible entró en un incendio
librando peligros , su vida exponiendo
para salvar a mi madre y se quedó ciego".

El médico abraza aquel cuerpo yerto
y dice muy bajo, contemplando al muerto:
"adiós, pobre amigo, adiós, pobre ciego,
¡que triste fue el pago que tuvo tu mérito!,
pediste limosna como un pordiosero
sin que un alma noble,
sin que un hombre bueno te diera la mano,
ni aun este médico,
a quien dedicaste tu instante postrero.

Varios empleados se llevan al muerto,
el médico llora implorando al cielo
por aquel héroe anónimo, el joven bombero,
que murió sin gloria, como un pordiosero,
pidiendo limosna para su sustento.

Fue la media noche, y todo quedó en silencio...

Desconozco el autor de esta sobrecogedora historia, y me da pena, 
porque sería para mí un honor poder escribir su nombre aquí.

13 comentarios:

  1. Creo que es Agustín Rodríguez, guatemalteco.

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  2. Agustín Rodríguez (Guatemala) es el autor Saludos

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  3. Hace sesenta años aproximadamente, mi hermana mayor quien declamaba poesias muy largas, aprendio este poema y lo recito con apenas 10 o 12 años de edad, en un acto a las madres en Rep. Dom.
    Bello y a la vez triste poema, pero que describe una realidad que puede acontecer, arrancó lagrimas a una audiencia de aproximadamente 200 personas. Así quedó grabada en mi mente y corazon esa historia triste y a la vez Hermosa.

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  4. Yo conosco al autor, es mi familia, aquel poeta que escribió este poema es mi abuelo, Emilio Delgado

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  5. autor anonimo, desde hace mas de 40 años la escuche en alvarado veracruz mexico, a Felix Desgado le apodabamos el Bucho, el declamaba este tan hermoso poema.

    Saludos

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  6. Ya la había oído hace muchos años por un amigo de Holguín Cuba pero me dijo que es un poema que fue hecho por un preso de no se que nacionalidad

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