Hay unas 180 especies de madreselvas, siendo la Lonicera periclymenum, la madreselva europea, la que es común entre nosotr@s. Es una planta arbustiva, buena trepadora, de ramas sarmentosas, que crecen rápidamente, floreciendo con vistosidad en primavera/verano y desprendiendo agradable fragancia, más intensa de noche.
Es frecuente observar mariposas y abejas que buscan el néctar de sus flores, y también algunos pájaros golosos. Las hormigas son consideradas enemigas de las madreselvas.
La madreselva crece al sol, aunque prefiere la semisombra, resiste las heladas y se multiplica por esquejes cortados, que se entierran y enraízan fácilmente. En otoño da unos frutos rojos en forma de baya, que pueden resultar tóxicos (no son venenosos) si se ingieren, por lo que conviene avisar a l@s niñ@s. Se trata de una especie muy intrusiva que debe ser controlada, porque, como crece muy rápido, puede invadir el territorio de otras plantas, consumiendo todo el agua y los recursos orgánicos.
La medicina natural la recomienda para todo tipo de enfermedades respiratorias (asma, bronquitis, tos, tuberculosis...), e, incluso, resfriados y gripe. También es buena para el hígado. Igualmente, su uso ayuda a depurar el organismo en casos de retención de líquidos, piedras en el riñón y artritis.
También se le dan otros nombres como madreselva de los bosques, chupamiel, descuernacabras, escuernacabras, enredadera
silvestre, hierba enredadera, madre de selva, madreselva vulgar, madreselva perfoliada, madresilva, mariselva, marisilva, matrisilva, bidaqueira, periclimeno,
samuso, sogüeña, sogüeñas, virginia...
En Zierbena está muy extendida, principalmente en el monte Punta Lucero, donde se pueden encontrar decenas de ellas; sobre todo en los bordes de la parte final de la pista que llega hasta La Batería, mirando a San Mamés y por la llanada de Orbás. También hay un ejemplar de precioso porte en el Pico Moreo, sobre Espinillas.
En la antigüedad su flor era símbolo del amor eterno (los franceses se la regalaban a sus esposas para demostrarles su compromiso), pero también de la felicidad
añorada, o de la nostalgia de los tiempos pasados que no se recuperan jamás.
En Zierbena está muy extendida, principalmente en el monte Punta Lucero, donde se pueden encontrar decenas de ellas; sobre todo en los bordes de la parte final de la pista que llega hasta La Batería, mirando a San Mamés y por la llanada de Orbás. También hay un ejemplar de precioso porte en el Pico Moreo, sobre Espinillas.
Udaberri euritsu honetan, asko dira naturak gugandik gertu jarri dizkigun usain gozoak, besteak beste, basoko atzamarrena, usain eldarniozkoa bene-benetan; ama-naturaren opari ikaragarria.
Euskal Herrian zehar izen mordoxka entzun daitezke: Basoetako atxaparra, Jangoikuan atzamarrak, Jesukriston atzaparrak, Kriston atzaparrak, Amabirjiñan atzaparrak, Amaberjiñ-atzaparrak, Ama Birjiñaren beatzak, Apustuluen atzamarrak... Baita ahuntz-osto, ezker-aien...
Gaztelaniaz landare
igokari hau izendatzeko gehien darabilgun izena madreselva da.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.