Oskar Medina pasará a la historia como el nº 1 de paleta goma en la historia veinteañera del club Galipa. Y mira que ha habido grandísimos pelotaris en esta modalidad en nuestro club: Eloy Tajada, Loureiro, Igor Tajada, Gorka Rodríguez, Ciber, Joxemari Alonso, Jon Serrano, Asier Vicente, Iñaki Leonardo y hasta Ibai Pérez. No sé si me olvido de algún otro ilustre, podría ser.
Pero es que Oskar ha sido una encina perenne y no un roble de temporada. Esa es la diferencia.
Nadie en el club ha jugado más que él, ni mejor, ni ha ganado tantos partidos, ni ha dado menos rompederos de cabeza. Oskar Medina merece un capítulo aparte en la historia del club. La pena es que no veo yo que la historia de Galipa sea un libro que interese.
Ahora Oskar Medina dice que se irá de Galipa con su mentor, con el loco perseguidor que estuvo detrás de él hasta que vino al club. Trataré de disuadirle. Es muy terco, como yo. Pero si le convencí hace 18 años para que viniera, igual puedo convencerle ahora para que no se vaya.
Eloy, Joxemari, Jon Serrano y yo nacimos demasiado pronto. Tendríamos que haber nacido en 1975, como Oskar. Habríamos estado una década más jugando contra él en el frontón. Eloy y yo, con 15 años menos, seríamos capaces de agotarle. Nadie ha conseguido eso.
Si no va a merecer la pena escribir la historia de Galipa, puedo escribir la historia de Oskar Medina en los frontones. Sería un libro muy gordo e ilustrado. Hasta Jose A. Perez "Piter Lim" se lo querría leer, sentado en una hamaca en Ibiza.
Yo me veo dentro de unos meses jugando con Oskar y otros dos por los frontones. Saber que me alejo de Galipa me está dando mucha energía positiva. Y, además, los fisios del kiroldegi de Zierbena me recuperan la rodilla semanalmente. Son unos cracks. Bueno, todos menos uno, que no se acuerda de darme cita. Yo me siento un cliente más que un paciente.
Yo sé que puedo contar con Oskar para lo que necesite. Y voy a contar con él. Le tengo que hacer un encargo para mi entierro. Sé que él lo cumplirá.
Nada me haría más feliz que volver a salir a una kantxa con Eloy, Oskar y otro más (no cualquiera). Joxemari que haga de juez; por desgracia, ya no va a querer jugar. Lástima. Fue un excelente compañero para mí. De Eloy Tajada también dicen que ya no está para jugar. No me lo creo. Los mitos nunca dejan de ser pelotaris. Eloy sabe lo que le quiero, o eso pienso yo, pero si supiera cuánto le he echado de menos estos años, coge la pala y me dice... "jubilao, baja paquí que te espero en el frontón". Ese es el sueño de mi vejez. Después, ya me podrá morir tranquilo. Sería como RESUCITAR SIN HABER MUERTO.
Nadie sino yo sabe tan bien lo que Eloy ha hecho por este deporte en Zierbena. ¡Y sin tener por qué hacerlo! Tengo que pedirle un favor a E. Mendikote.
No voy a abandonar este mundo sin dejarlo escrito. Historias póstumas podrían titularse, ¿no? Seguro que a Txarly de Las Karreras, a Asier Uranga, y a Javi el del Waitaki les encantará leerlas. Esos tienen un don: la lealtad.
A Oskar Medina todos le quieren ganar, desde hace dos décadas, pero pocos le ganan. Es el referente de la paleta goma de Galipa. Nadie le ha nombrado a dedo. Se lo ha ganado él, domingo a domingo, mes a mes, temporada a temporada, tanto a tanto, partido a partido, campeonato a campeonato.
Nunca se ha creído el mejor, pero siempre se ha preparado para serlo.
En el partido de hoy, Iker Curto se merece el MVP. No pasa nada si no se lo doy a Oskar Medina. Él ya tiene el álbum lleno y le sobran muchos cromos repetidos.
Curto ha echado solamente dos pelotas fuera, a contracancha, por centímetros. Pero es que ha metido unos cuantos tantos y ha provocado el error de los contrarios en otros. La zurda de Curto ha sido hoy un hacha que cortaba álamos getxotarras.
Urko Martinez lo ha sufrido. Es buen delantero, con potencia y magnífica zurda. No sabía qué hacer, como defenderse, como presentar batalla a los colorados. Se ha sentido como un juguete y le habrá dolido. A mí me gusta este delantero. Le veo cualidades y potencial. De hecho le hice llegar una invitación para venir a Galipa no hace mucho. Pero estaba a gusto donde está.
He intentado muchas cosas y no las he conseguido. Eso también hace que tires la toalla.
Iraitz estaba en Alaitasuna de Bakio y juega ahora para Getxo. Me han sorprendido los brazos que ha conseguido. Tiene un tronco de haya centenaria. Es buen zaguero, pero jugar contra Oskar son palabras mayores.
Si Iraitz Ugalde entrenase una vez a la semana contra Oskar, crecería mucho como pelotari. Oskar te exige demasiado. Ha puesto en juego una pelota amarilla Arambillet, de una dificultad máxima. Jugar a paleta goma a esa velocidad es una variante de la paleta goma tradicional. ¡La culpa de todo la tiene Unda!
La pelota parece un obús, sale del frontis como un misil incontrolable. Oskar ha tenido algún contratiempo con el pega palo y ha perdido hasta seis pelotas. Algo extraño en él. Y hasta ha fallado un saque, pero cuando le ha arreado... la pelota ya no volvía a frontis. Y si volvía allí estaba Curto para subir otro tanto al casillero colorado.
Getxo sacaba pelota blanca de 75 gramos, también de Arambillet. Tampoco con esa tenían ventaja, porque Curto--Oskar la manejaban con destreza, pero, con ella, al menos, los de Getxo disputaban los tantos.
26º en el frontón. En pleno octubre. Negligencia climática.
Era mi noveno partido en 40 horas.
No es eso lo que más me ha cansado.
Es lo que no se ve, pero se siente.
Oskar no me va a echar de menos.
Le voy a retar semanalmente, pero con ventajas.
Él es un bulldog de pura raza. Yo sólo un bodeguero impertinente.
Pues, ya llevan cuatro victorias en cuatro partidos.
En Getxo hay parejas interesantes: Beñat--Ibarzabal, Urko--Iraitz, Natxo G--Ruper, Goikoetxea--Andima... Me apetece enviarles mi enhorabuena y decirles que valoro mucho el trabajo que están haciendo. Sustatxa al mando del barco, ¿no?
Oskar Medina, Iker Curto, Urko Martinez eta Iraitz Ugalde
Con el 10 a 04 en contra, Getxo B pide su primer tiempo de descanso. Y con el 19 a 06 solicitan su segundo descanso. No por cansancio, sino para frenar la sangría e intentar buscar soluciones.
Hicieron lo correcto. Estaban centrados, pese al marcador. Eso habla bien de ellos.
Galipa solamente pidió un tiempo, por los contratiempos de Oskar con el pega palo, que no conseguía tener buen agarre en la pala.
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