viernes, 13 de febrero de 2015
"El ruido de la carreta" (cuento)
Un día salí de paseo con mi padre.
De pronto, él se detuvo en una curva y después de un largo silencio me preguntó:
-- Además del cantar de los pájaros, ¿oyes algo más?
Agudicé mis oídos y, después de unos segundos, le respondí:
-- Sólo escucho el ruido de una carreta.
-- Eso es, dijo mi padre. Es el ruido de una carreta vacía.
Entonces le pregunté con curiosidad:
-- ¿Cómo sabes que es una carreta vacía si no la vemos?
-- Es muy fácil, sé que está vacía por el ruido. Cuanto más vacía está la carreta, más ruido hace.
Crecí y me hice una mujer.
Cada vez que escucho a una persona hablando demasiado, interrumpiendo la conversación de los demás, presumiendo de lo que tiene o de lo que hace, prepotente y menospreciando al resto de personas que lo rodean, tengo la impresión de oír la voz de mi padre diciendo:
-- "Cuanto más vacía está la carreta, más ruido hace".
La humildad consiste en callar nuestras virtudes y permitirle a los demás descubrirlas.
Piensa que existen personas tan pobres, que lo único que tienen es soberbia y dinero.
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