Más que una derrota

AIMAR GUTIERREZ

GALIPA C (Prieto--Aimar) es una pareja con tendencia a hacer todo aquello que no les conviene. Es por eso que pierden la mayoría de sus partidos, pudiendo ganar  la mayoría de los que pierden, porque potencial tienen, a pesar de estar todavía verdes para  navegar con soltura  en la 2ª categoría de paleta  goma masculina del campeonato de  Bizkaia.

No sé si son conscientes de la oportunidad que el club Galipa les ha dado  en este campeonato, para poder demostrar lo que ellos  piensan, que pueden competir en esta categoría, porque hay otros  jugadores en el club que también podrían  hacerlo y  a ellos les he dado la titularidad en las cuatro primeras jornadas, con dos partidos en casa y otros dos fuera.

Ya tienen tres derrotas  en la motxila. Y, seguramente, se consolarán como otros muchos quee he conocido, diciéndose que de las derrotas se aprende. A decir verdad, he conocido a muy pocos que hayan sido capaces de aprender de sus derrotas. Esa frase hecha es el consuelo de los perdedores, que no saben corregir sus errores. Hay un largo camino entre  perder, porque  el contrario es mejor que tú, y perder, porque tú regalas los tantos, y, por extensión, el partido. Prieto--Aimar, juegan, pero, de momento, no compiten, no saben hacerlo.

Precisamente, éste, no era el mejor partido para  llevarse la victoria, porque BIKUÑA--BELAMENDIA (HORI HORI BB) de Elorrio, son una pareja a medio camino entre 2ª y 1ª. En 2ª son de lo mejorcito que hay. Y en 1ª serían claros aspirantes al descenso.

La derrota de ayer noche de Prieto-Aimar yo ya me la esperaba. Normalmente,  en más de un 90% delos partidos suelo acertar en los pronósticos. Y, a menudo,  clavo hasta el resultado. Es lo que te da llevar toda la vida en esto y recoger información, acumular datos y ver partidos. Se llama experiencia trabajada.

No me llevé un chasco por que ganaran Xabi y Ganix, no. Me llevé un chasco, una desilusión, una enorme decepción por cómo sucedió.

Hori Hori BB metió en el cestaño tres pelotas blancas de cuadro amarillo, de 75 gramos. ¡Las tres! Estaba claro  a qué  querían jugar. GALIPA C metió  en el cestaño una pelota amarilla, otra de 63 g blanca de punto amarillo y la tercera, de 75 gramos, como las de los de  Elorrio. Evidentemente, ésta última  sobraba, su lugar debería haber sido ocupado por otra pelota ligera, más balín, más rápida...

Ayer, en los tres partidos del festival del viernes,  como juez local del club,  saqué txapa  azul siempre, por lo que siempre comenzó sacando  la pareja visitante.

Bikuña-Belamendia  estaba claro cual iban a sacar, la de 75g que habían calentado. Cuando vi que Galipa C seguía con esa pelota, ya me entraron ardores. Y cuando vi que no la quería cambiar,  más. ¿Cómo puedes jugar  con la pelota de un rival que ha metido las tres pelotas iguales? ¿Cómo puedes jugar  con una pelota  que  quiere Xabi Bikuña, que era  con mucho,  el mejor pelotari  sobre la kantxa? Es la pelota ideal para  sus remates a dos paredes, habilidosísimo en ese golpeo, y para  hacer cortadas  al txoko con su derecha.

Mis pelotaris, ciegos, como cuando esa pelota se empala, la sientes, ves que la  mueves bien, creían que  esa era su pelota. Error gravísimo, de una  estrategia  totalmente errónea. Prieto-Aimar son dos mocetones fuertes, que si empalanbien la mueven, y pecaron de inocentones.

Nunca hay que jugar  con la pelota  que  a ti te gusta. Hay que jugar  con la pelota  que no le gusta al contrario. A mí me lo enseñço Eloy Tajada, como otras tantas  cosas. Pero yo siempre fui de los que  quise aprender, supe escuchar y  dejarme guiar del que  sabe. Prieto-Aimar no parece que tengan esa filosofía.

Cuando iban perdiendo 06-09 les dije que si seguían jugando con la pelota de Hori Hori iban  ha perder 25-12. Y que esa era la única opción, que no había más, que iban a disputar tantos peloteados, pero que se iban a quedar en 12. Que si querían eso, adelante. Pero que si querían  intentar ganar, difícil pero no imposible, que debía sacar pelota  amarilla.

El motivo estaba claro. Con pelota  amarilla, el peso de Hori Hori no lo iba a llevar Bikuña, porque ya no iba a tener pelotas   para rematar  entre los cuadros 4 y 6, sino que la pelota amarilla le iba a pasar por encima y  se iba a tener que ir al cuadro 7, pero de ahí ya no se remata tan fácil y, además,  Bikuña no iba  a  controlar la pelota  amarilla igual  que la de 75 gramos, porque son dos mundos diferentes.

Mis pelotaris no confiaron en mí. Ni tampoco confiaron el la pelota amarilla, la sacaron por sacar, falló Aimar hasta el saque; Prieto  se quedó parado... no la querían. Ellos querían la pelota blanca de 75 gramos. La pelota  blanca de 75 gramos puede ser la pelota de Prieto-Aimar  en otros partidos, pero en éste era la peor pelota que podían elegir. Cabezotas ellos, la eligieron.

Con la pelota de 75 gramos, Aimar  se desfondó, porque le pega como un auténtico animal, da gusto verle golpear a la bola, pero  se desfonda en 15 tantos. Y, a partir de ahí, la lleva. Ya no puede. La verdad es que mirándole, viendo el imponente físico que tiene, no termino de entender, que no aguante  una hora  rompiendo  la pelota, pero...

El partido prosiguió entre mi  enorme decepción, porque mis jugadores no me hiciron caso. Mientras miraba al partido me puse a pensar, qué pintaba  yo  allí, para qué me quieren todos estos... me querrán para  que les ponga los horarios que quieren, para que les facilite materiales baratos, para  que les atienda  siempre, para  que  les haga de juez... para  que  me dedique  al club horas y horas, pero para nada más... La verdad es que  tenía ganas de marcharme para casa y mandarles a  tomar por el culo... como Extremoduro, pero no me dejan  llevar la camiseta esa, ya sabéis, la del  famoso disco de la banda de Robe Iniesta ("Iros todos a tomar por culo").

Cuando iban ya 20-11, va Aimar, que llevaba  rato mirándome de reojo, consciente de que  habían metido la pata hasta el fondo, decide sacar  la amarilla. Me la pide y le digo: "demasiado tarde ya".

Con el 12 a 24 vuelve  a sacarla y me dice: "otra vez más ha clavado el resultado".  Bikuña, ya relajado, les regala un tanto más. 13-25.

La derrota  yo ya  contaba con ella.

La actitud de mis pelotaris es lo que me ha hundido la moral.

Traerá consecuencias. Seguro.

Llevo toda la vida  en esto. No seré el más listo, pero sé bastante. Galipa es un gran club  en un pueblo pequeño donde la pala se ha convertido en un movimiento social enorme, que aún no tiene lo que  objetivamente se merece, pero que  tiene tendencia al alza. Y un porcentaje muy grande de este éxito es por que yo siempre he estado ahí, con Eloy, con Joxemari, pero siempre dedicándome  al club. No pueden venir quienes  son unos recién llegados, que  han llegado porque yo les he abierto la puerta del club y hacer lo que  les da la gana, llevándome la contraria en la elección del material o de la estrategia. Para que yo les respete y tenga en cuenta, ellos  tienen que respetarme a mí y a mis indicaciones.