FILOSOFÍAS PELOTAZALES
Al frontón hay que ir a jugar el partido, pero, en realidad, el partido hay que empezar a jugarlo mucho antes. Cuando preparas la motxila ya estás jugando el partido y si te dejas las gafas o la toalla ya estás perdiendo tantos, igual que cuando rematas bajo txapa. Por supuesto, la motxila no se prepara de prisa y corriendo, sino con tiempo y concentración necesaria.
Al frontón hay que ir con el cuchillo entre los dientes, pero con la cabeza despejada. Si no, no escucharás cuando te hablen. Y si tienen que hablarte será, seguramente, porque tu juego es francamente mejorable. Si te habla el compañero, escúchale, analiza su consejo y no le contestes antes de terminar de dártelo, porque, entonces, no le estás escuchando.
No justifiques tus fallos con un "es que...". Eso es doble error. Asume el fallo y no lo vuelvas a cometer.
Si eres pelotari sin filosofía pelotazale siempre serás un mediocre. Y tú no creo que quieras ser un mediocre, ¿o sí?
CONCLUSIÓN
Jon Serrano (aita) tiene prohibido retirarse, no puede colgar la pala. Es de lo poco que queda de una extirpe en extinción.
Se retiró Eloy Tajada, se retiró Joxemari Alonso, se tuvo que retirar Igor Fernandez, se retiró Igor Tajada, se tuvo que retirar Asier Vicente, pasó de paso Sergio Loureiro, se ha tenido que retirar Gorka Rodríguez... pero nos queda Jon serrano.
Antes, disfrutaba viéndoles jugar a todos esos. Ahora me aburro viendo jugar a otros muchos. Son dos mundos diferentes. Nada que ver.
La diversión de hace dos décadas se ha transformado en padecimiento. Jon Serrano se retirará porque quiera, o porque se vea obligado, pero no porque nadie que venga por detrás le retire.
La elegancia, la educación, el respeto, la humildad... se irán con él.
CLAVE
Jon Serrano (aita) fue un roble azotado por el viento, le zarandearon, le arrancaron hasta el aliento, le doblaron hasta el espinazo, sufrió y sufrió... pero se mantuvo en pie durante la casi hora de partido.
Jon Serrano aita no perdió la fe en la victoria. O sí, porque seguro estoy de que, durante casi todo el partido, la veía muy lejana. Pero no se rindió.
Y al final se llevó el premio que él merecía y que sus contrarios, en un gesto que les honra, le reconocieron muy deportivamente.
RESUMEN
Perdieron los azules y lo sé por el marcador final, pero no sé si me lo creo. Porque fueron merecedores de la victoria, victoria que también merecía Jon Serrano (aita) por su esfuerzo y saber estar.
Asier Gonzalez llevaba años sin venir por Zierbena y estuvo bastante bien durante todo el partido. Siempre es buena noticia volver a ver a chicos como él.
Ander Unda (¡qué buen rato pasamos en aquel desafío con Garazi, Silvia y el rumano en el MALOKA-GALIPA¡). Sorpresa y alegría verle aparecer en el frontón de Zierbena. Oye, ya juga Unda, ¡eh!, le falta todavía, pero tiene momentos de acierto y brillantez. Y la sonrisa siempre, hasta cuando pierde, eso no tiene precio. Grande Ander Unda.
Jon Serrano (hijo) jugó mal. Mal y punto. Vino pero no estaba. Se fue y volvió al final, en los últimos 10 tantos y ahí si resultó determinante.
Brull y David le decían cómo posicionarse para defender con la pelota amarilla de los de Arteaga, pero no escuchaba. Estaba tan bloqueado que no respondía. Es humano, pero parecía uno de esos aparatos electrónicos que se bloquean y no responden a ninguna orden.
Contentos podemos ir para casa, porque ganar era posible, pero si no estamos... mal vamos.
La cosa es que no les iba mal a los nuestros la pelota amarilla de Arteaga. Jon Serrano (aita) la movía más fácil, sobre todo después del tute que llevaba, y Jon Serrano (hijo) tenía toque con ella, le daba velocidad... el problema es que se posicionaba como si siguiera jugando con la blanca suya de 75 gramos.
Cuando ya daba casi todo por perdido. RESET y todo empezó a funcionar como era lo lógico, lo esperado, lo norma
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